Corazones de Zagreb
Los “belenes” o nacimientos fueron difundidos por los padres de la orden betlemita. En Zagreb antiguamente se hacían nacimientos en casa. Era una tradición que ponía en valor la ingenuidad de las amas de casa. Cada hogar se enorgullecía de su nacimiento cuanto más adornado, más original, más digno de su nombre.
Esta costumbre desaparece con el ajetreo de la vida moderna pero las iglesias la mantienen. Ahora lo que se hace es visitar y admirar los nacimientos de las muchas iglesias de Zagreb. Se ha introducido entre las costumbres la tradición de visitar 7 iglesias en la temporada de Navidad. En mi familia la última iglesia que visitamos es la iglesia de San Francisco pues sus figuras son realistas de tamaño natural en un ambiente de cerros y montañas cubiertas de vegetación, pobladas de rebaños y pastores.

A principios del siglo XX muy sutilmente se infiltró la noción de adornar el árbol de Navidad con los corazones de Zagreb. Estos corazones, hechos de pan de almíbar otrora comestibles, ahora se encuentran en las tiendas de suvenires. Se hacen de materiales y tamaños diferentes: cerámica, cristal, madera, etc. Cada vez que viajo a Lima tengo que llevarle a mi prima por lo menos un kilo de estos corazones para su árbol.
Con el tiempo la Navidad se convirtió en una fecha comercial
Antes se vendían juguetes para los más pequeños. Los juguetes preferidos por los niños eran: carretas, cornetas, payasos de trapo. Tambien caballitos de madera, soldaditos de plomo, carritos, tambores, casas de muñecas y herramientas.
Hacia 1950, muchas de estas costumbres se fueron perdiendo y la Navidad se va a parecer más a la que conocemos actualmente.

Zagreb se adorna efusivamente hasta antes del primero de diciembre para darle al Adviento ese ambiente de regocijo ante la Natividad. El Adviento en Zagreb es algo muy especial imposible de describir en varias palabras. Hay que venir a presenciarlo, a vivirlo, a sentirlo. Hasta la vista!